martes, 24 de febrero de 2009

Casa del Movimiento en Benito Juárez

Casa del Movimiento

viernes, 20 de febrero de 2009

Frida por Raúl Martell

martes, 17 de febrero de 2009

Agreden A Frida Guerrera

Preocupación por la
seguridad de Verónica Villalvazo

Publicado por Hugo

México D.F., 16 de febrero de 2009 (Article19/Cencos).- El pasado jueves
29 de enero, un grupo de entre 5 y 6 jóvenes, agredieron física,
verbal y psicológicamente a la periodista independiente, Verónica Villalvazo— cuyo pseudónimo es Frida Guerrera— mientras caminaba sobre la calle de Allende casi llegando a la esquina de Crespo en el centro de la ciudad de Oaxaca. Al parecer, el móvil de la agresión es intimidarla y silenciarla por las investigaciones en profundidad que ha realizado sobre el
caso de pederastia en el Instituto San Felipe de Oaxaca.

En entrevista para Article19 y Cencos, Villalvazo narró los hechos: "empezaron a decir sí, es Frida, es ella en repetidas ocasiones, me rodearon y empezaron a jalar mi equipo, yo levanté los brazos y les dije que se llevaran todo, uno de ellos me jaló de la mochila donde cargo mi laptop ocasionando con esto que me cayera al suelo, al ver eso, el resto empezó a jalar la cámara fotográfica que me proporcionó la agencia de noticias. De inmediato, uno de ellos dijo ya estuvo, el susto ya está, lo que viene sigue después, retirándose de inmediato".

Cabe señalar que la zona de la agresión no es una ruta acostumbrada por la periodista y normalmente a esa hora ya se encuentra en su domicilio por seguridad. Además, vale la pena considerar que 4 días antes de esta agresión, Villalvazo dijo haber sido perseguida por dos sujetos de identidad desconocida durante sus actividades periodísticas. Datos que parecen confirmar que está siendo vigilada.

En este contexto es necesario decir que, Villalvazo ha venido siendo perseguida, agredida y hostigada desde 2007 tras documentar la denuncia que hiso Leticia Valdés Martel por la violación de su hijo de tan sólo 4 años a manos de un profesor en el Instituto San Felipe; tema que recientemente volvió a tener interés para los medios nacionales, al darse a conocer la posible injerencia de algunos
políticos oaxaqueños en el caso. Mediante una entrevista, Villalvazo hizo pública dicha información en un video, mismo que puede ser consultado en: http://video.google.es/videoplay?docid=-4788686809046149025 y que fue usado como prueba el 6 de febrero en el juzgado 3º de lo penal.

Empero, Villalvazo no sólo ha puesto su atención en este caso. También ha documentado el hostigamiento al periódico Noticias, voz e imagen de Oaxaca, el levantamiento social de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y la desaparición de las mujeres triquis, Daniela y Virginia Ortiz Ramírez. Todos ellos, a través de su blog: http://fridaguerrera.blogspot.com. En este sentido, hay que remarcar
que el estado de Oaxaca es un ejemplo ilustrativo de lo que sucede en México en materia de libertad de expresión pues de 2007 a la fecha en el estado se han registrado al menos 40 agresiones a periodistas y medios de comunicación, de los cuales 9 han sucedido entre enero y febrero de 2009, datos que parecen
indicar que, ejercer el periodismo en el estado significa vivir en peligro constante.

Las agresiones a periodistas y medios de comunicación son un hecho lamentable y peor aún cuando provienen de funcionarios públicos quienes como tarea fundamental tienen el garantizar la libertad de expresión y el acceso a la información de los y las ciudadanas. Por ello, Article19 y Cencos hacen un llamado a las autoridades del estado

mexicano, de acuerdo a las obligaciones internacionales en materia de derechos humanos asumidas, para que promuevan y garanticen el pleno ejercicio de la libertad de expresión.



Las intimidaciones, amenazas y hostigamientos a periodistas y comunicadores son prácticas que constituyen una amenaza para la democracia pues la libertad de expresión es un requisito indispensable para su consolidación.

Carta Abierta a Carlos Slim

Carta Abierta a Carlos Slim
DENISE DRESSER
Estimado Ingeniero:

Le escribo este texto como ciudadana. Como consumidora. Como mexicana preocupada por el destino de mi país y por el papel que usted juega en su presente y en su futuro. He leído con detenimiento las palabras que pronunció en el Foro Qué Hacer Para Crecer y he reflexionado sobre sus implicaciones. Su postura en torno a diversos temas me recordó aquella famosa frase atribuida al presidente de la compañía automotriz General Motors, quien dijo: “Lo que es bueno para General Motors es bueno para Estados Unidos”. Y creo que usted piensa algo similar: Lo que es bueno para Carlos Slim, para Telmex, para Telcel, para el Grupo Carso, es bueno para México. Pero no es así. Usted se percibe como solución cuando se ha vuelto parte del problema; usted se percibe como estadista con la capacidad de diagnosticar los males del país cuando hacontribuido a producirlos; usted se ve como salvador indispensable cuando se ha convertido en bloqueador criticable. De allí las contradicciones, las lagunas y las distorsiones que plagaron su discurso, y menciono las más notables:

–Usted dice que es necesario pasar de una sociedad urbana e industrial a una sociedad terciaria, de servicios, tecnológica, de conocimiento.
Es cierto. Pero en México ese tránsito se vuelve difícil en la medida en que los costos de las telecomunicaciones son tan altos, la telefonía es tan cara y la penetración de internet de banda ancha es tan baja.
Eso es el resultado del predominio que usted y sus empresas tienen en el mercado. En pocas palabras, en el discurso propone algo que en la práctica se dedica a obstaculizar.

–Usted subraya el imperativo de fomentar la productividad y la competencia, pero a lo largo de los años se ha amparado en los tribunales ante esfuerzos regulatorios que buscan precisamente eso.
Aplaude la competencia, pero siempre y cuando no se promueva en su sector.

–Usted dice que no hay que preocuparse por el crecimiento del Producto Interno Bruto; que lo más importante es cuidar el empleo que personas como usted proveen. Pero es precisamente la falta de crecimiento económico lo que explica la baja generación de empleos en México desde hace años. Y la falta de crecimiento está directamente vinculada con a persistencia de prácticas anticompetitivas que personas como usted justifican.

–Usted manda el mensaje de que la inversión extranjera debe ser vista con temor, con ambivalencia. Dice que “las empresas modernas son los viejos ejércitos. Los ejércitos conquistaban territorios y cobraban tributos”. Dice que ojalá no entremos a una etapa de Sell Mexico a los inversionistas extranjeros, y cabildea para que no se permita la inversión extranjera en telefonía fija. Pero al mismo tiempo usted, como inversionista extranjero en Estados Unidos, acaba de invertir millones de dólares en The New York Times, en las tiendas Saks, en Citigroup. Desde su perspectiva incongruente, la inversión extranjera se vale y debe ser aplaudida cuando usted la encabeza en otro país, pero debe ser rechazada en México.

–Usted reitera que “necesitamos ser competitivos en esta sociedad del conocimiento y necesitamos competencia; estoy de acuerdo con la competencia”. Pero al mismo tiempo, en días recientes, ha manifestado su abierta oposición a un esfuerzo por fomentarla, descalificando, por ejemplo, el Plan de Interconexión que busca una cancha más pareja de juego.

–Usted dice que es indispensable impulsar a las pequeñas y medianas empresas, pero a la vez su empresa –Telmex– las somete a costos de telecomunicaciones que retrasan su crecimiento y expansión.

–Usted dice que la clase media se ha achicado, que “la gente no tiene ingreso”, que debe haber una mejor distribución del ingreso. El diagnóstico es correcto, pero sorprende la falta de entendimiento sobre cómo usted mismo contribuye a esa situación. El presidente de la Comisión Federal de Competencia lo explica con gran claridad: Los consumidores gastan 40% más de lo que debieran por la falta de competencia en sectores como las telecomunicaciones. Y el precio más alto lo pagan los pobres.

–Usted sugiere que las razones principales del rezago de México residen en el gobierno: la ineficiencia de la burocracia gubernamental, la corrupción, la infraestructura inadecuada, la falta de acceso al financiamiento, el crimen, los monopolios públicos. Sin duda todo ello contribuye a la falta de competitividad. Pero los monopolios privados como el suyo también lo hacen.

–Usted habla de la necesidad de “revisar un modelo económico impuesto como dogma ideológico” que ha producido crecimiento mediocre. Pero precisamente ese modelo –de insuficiencia regulatoria y colusión gubernamental– es el que ha permitido a personas como usted acumular la fortuna que tiene hoy, valuada en 59 mil millones de dólares. Desde su punto de vista el modelo está mal, pero no hay que cambiarlo en cuanto a su forma particular de acumular riqueza.

La revisión puntual de sus palabras y de su actuación durante más de una década revela entonces un serio problema: Hay una brecha entre la percepción que usted tiene de sí mismo y el impacto nocivo de su actuación; hay una contradicción entre lo que propone y su forma de proceder; padece una miopía que lo lleva a ver la paja en el ojo ajeno e ignorar la viga en el propio.

Usted se ve como un gran hombre con grandes ideas que merecen ser escuchadas. Pero ese día ante los diputados, ante los senadores, ante la opinión pública, usted no habló de las grandes inversiones que iba a hacer, de los fantásticos proyectos de infraestructura que iba a promover, del empleo que iba a crear, del compromiso social ante la crisis que iba a asumir, de las características del nuevo modelo económico que apoyaría. En lugar de ello nos amenazó. Nos dijo –palabras más, palabras menos– que la situación económica se pondría peor y que ante ello nadie debía tocarlo, regularlo, cuestionarlo, obligarlo a competir. Y como al día siguiente el gobierno publicó el Plan de Interconexión telefónica que buscaría hacerlo, usted en respuesta anunció que Telmex recortaría sus planes de inversión. Se mostró de cuerpo entero como alguien dispuesto a hacerle daño a México si no consigue lo que quiere, cuando quiere. Tuvo la oportunidad de crecer y en lugar de ello se encogió.

Sin duda usted tiene derecho a promover sus intereses, pero el problema es que lo hace a costa del país. Tiene derecho a expresar sus ideas, pero dado su comportamiento es difícil verlo como un actor altruista y desinteresado que sólo busca el desarrollo de México. Usted sin duda posee un talento singular y loable: sabe cuándo, cómo y dónde invertir.
Pero también despliega otra característica menos atractiva: sabe cuándo, cómo y dónde presionar y chantajear a los legisladores, a los reguladores, a los medios, a los jueces, a los periodistas, a la inteligencia de izquierda, a los que se dejan guiar por un nacionalismo mal entendido y aceptan la expoliación de un mexicano porque –por lo menos– no es extranjero.

Probablemente usted va a descalificar esta carta de mil maneras, como descalifica las críticas de otros. Dirá que soy de las que envidian su fortuna, o tienen algún problema personal, o una resentida. Pero no es así. Escribo con la molestia compartida por millones de mexicanos cansados de las cuentas exorbitantes que pagan; cansados de los contratos leoninos que firman; cansados de las rentas que transfieren; cansados de las empresas rapaces que padecen; cansados de los funcionarios que de vez en cuando critican a los monopolios pero hacen poco para desmantelarlos.

Escribo con tristeza, con frustración, con la desilusión que produce -presenciar la conducta de alguien que podría ser mejor. Que podría dedicarse a innovar en vez de bloquear. Que podría competir exitosamente pero prefiere ampararse constantemente. Que podría darle mucho de vuelta al país pero opta por seguirlo ordeñando. Que podría convertirse en el filántropo más influyente pero insiste en ser el plutócrata más insensible. John F. Kennedy decía que las grandes crisis producen grandes hombres. Lástima que, en este momento crítico para México, usted se empeña en demostrarnos que no aspira a ser uno de ellos.

Tristezas que voy guardando

Tristezas que voy guardando

Un viernes del mes de febrero que la casa de mis padres se quedo sola
mi padre cuco parga nos acompaño mas años que mi mama Ramona que
en paz estaba
mi casa solo y triste esta y es donde aprendí a caminar

Mi padre me dijo un día que lo invite
a ir a la ciudad de ,la esperanza
donde la basílica también esta
Me dijo ya no quiero ir para allá

Han pasado muchos años ya estoy cansado
Ya la conocí con tu mama al lado
Los recuerdos siempre están y en mi memoria quedaran
Si vuelvo voy a encontrar tristezas que voy guardando
Pedacitos de recuerdos y trocitos de mis sueños
Al lado de tu mama que descansando ahora esta

Mis hermanos ya se fueron algunos vecinos también murieron
Y la tumba de mis viejos que se han quedado dormidos
Que en el silencio eterno están.

Mis padres fueron maravillosos nunca nos falto amor
Pero ya murieron por eso no quiero regresar
Al nido de pajaritos como decía mi mama
Prefiero estar aquí viviendo de mis recuerdos
Ya no quiero regresar

Se bien que mi barrio donde nací
Ha cambiado ya no es igual
En la calle todo es nuevo
Vecinos buenos y malos ahora ahí están

Y se que los recuerdos son eso solo recuerdos
De momentos con mis hermanos trabajando y jugando
Siempre estarán y en mi mente nunca se perderán..
Mis padres también ya se fueron y ya nunca regresaran.

JUAN CARLOS PARGA TORRES.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Voces contra la Guerra

Analfabetismo político

El peor analfabeto es el analfabeto político.
No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el costo de la vida, el precio de los frijoles, del pan, de la harina, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas. El analfabeto político es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado y el peor de todos los bandidos que es el político corrupto, mequetrefe y lacayo de las empresas nacionales y multinacionales.

Bertol Brecht

La voluntad.

“Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: la voluntad”.
Albert Einstein

"Y por mi vinieron y nadie dijo nada"

"Primero vinieron a buscar a los comunistas y no dije nada porque yo no era comunista. Luego vinieron por los judíos y no dije nada porque yo no era judío. Luego vinieron por los sindicalistas y no dije nada porque yo no era sindicalista. Luego vinieron por los católicos y no dije nada porque yo era protestante. Luego vinieron por mí pero, para entonces, ya no quedaba nadie que dijera nada". Martin Niemöller Pastor protestante encarcelado por los nazis desde 1937 a 1945 1892-1984

El buen ciudadano

“El buen ciudadano es aquel que no puede tolerar en su Patria un poder que pretende hacerse superior a las leyes”. Marco Tulio Cicerón

Nos arrancan la voz de la garganta

La primera noche ellos se acercan y cogen una flor de nuestro jardín, y no decimos nada. La segunda noche ya no se esconden pisan las flores, matan nuestro perro y no decimos nada. Hasta que un día el más frágil de ellos entra sólo en nuestra casa, nos roba la luna, y conociendo nuestro miedo nos arrancan la voz de la garganta. Y porque no dijimos nada ya no podemos decir nada Vladimir Maiakovski. Poeta ruso 1893-1930